El deseo de aprender

                                                                EL DESEO DE APRENDER

Ayer, junto a mi compañera de estudio, y directora de mi circuito Patricia Beltramo, compartimos ocho horas del cursado de una materia de la Maestría en Gestión y Asesoramiento  de las Organizaciones Educativas en la Facultad de Humanidades y Artes de la UNR. El mismo día, mi prima Sonia, publicó las dos certificaciones recibidas: Posgrado en Educación Inicial y Primera Infancia en Flacso y Diploma en Auxiliar en Educación Especial. Y mi hermana Marisabel, aprobó el examen final del Diploma Superior en Psicoanálisis y prácticas socio.educativas. Aportes para abordar el malestar educativo actual...

De esto se trata la enseñanza, de cultivar nuestro propio deseo de aprender para poder CONTAGIARLO. 

Nuestros alumnos, docentes y directivos, según el rol que ocupemos, deben ver que:

•  LEEMOS un libro, un diario
•  DISFRUTAMOS de estar en el aula con ellos, enseñando y aprendiendo.
• Les PLANTEAMOS desafíos a resolver problemas, situaciones de la vida real, de su entorno.
• COMENZAMOS un tema con INTERROGANTES, mostrándoles cómo hacemos preguntas para que ellos nos imiten. 
• Los INVITAMOS a jugar, a participar en un juego de simulación...
• Nuestras CLASES son innovadoras, ya que se alejan de la clase magistral, frontal, con actividades y evaluaciones homogéneas. Si bien la inclusión de las computadoras y los celulares en las escuelas secundarias y de nivel superior mejoran nuestras clases, con que haya dos o tres en el aula, podemos transformar las estrategias que apliquemos.
• Podemos desarrollar nuestra enseñanza sin tener el sostén de un manual, de fotocopias de libros, o dar las mismas actividades que el año pasado... 

Siempre lo repito: tanto padres como  docentes somos MODELOS para niños, adolescentes y jóvenes.